Los libros físicos impresos con portada, contraportada, lomo y hojas de papel en su interior tienen un contenido tan rico como el oro. Tocar los libros, apreciarles sus sabidurías y entretenimientos a la vista. Leerlos, poder llevarlos a cualquier lugar, pasar las páginas y olerlos. Existe la onda de los libros electrónicos, pero el libro impreso no pasará en el tiempo, desde que existan las bibliotecas públicas, las personales, las librerías, las imprentas y los autores. Valoremos la riqueza de los libros, ya sea que los compremos, que los tomemos prestados o sean regalados.
Los libros son un excelente regalo.